La tradición cuenta que, en el siglo XIV, un grupo de pastores que huían de la peste desatada en Pedroche, se asentaron en torno al lugar donde hoy se ubica el Pozo Viejo, símbolo que dio el nombre a Pozoblanco. Pero también existe la creencia de que su nacimiento fue consecuencia de la colonización, al instalarse en la zona judíos enviados desde Córdoba tras la Reconquista.
En 1478 dejó de ser aldea y obtuvo el título de villa, convirtiéndose en una de las Siete Villas de Los Pedroches. Con los años, su prosperidad la situó como capital de la comarca y de la zona norte del Reino de Córdoba, donde se traslada al Corregidor de la Villa. Su posición geográfica le hicieron ser la capital económica y administrativa de Los Pedroches, pero manteniendo su sabor de pueblo de sierra.
Celebra la Romería y Fiestas de la Virgen de Luna y la Feria de Nuestra Señora de las Mercedes en septiembre, además de contar con numerosas fiestas y verbenas tradicionales. No podemos olvidar la Parroquia de Santa Catalina y las iglesias de San Sebastián y San Bartolomé, además de reseñar su Semana Santa, que fue declarada de Interés Turístico Nacional en el año 2001 y cuenta con uno de los espectáculos andaluces más bellos y singulares como es El Pregón.
Pozoblanco cuenta entre sus lugares más emblemáticos con la Plaza de Toros, conocido como el Coso de los Llanos, que cuenta con un museo que recoge toda su historia. Además, el municipio cuenta con muchos atractivos destinados a los amantes de la práctica deportiva en su Ciudad del Ocio, y, por supuesto, la existencia del primer campo de golf municipal de toda España.